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lunes, 20 de mayo de 2013

Ataque de tiburón dentro de una cabaña


Bucear de vez en cuando entre los fondos de la extraordinaria Hemeroteca Digital de la Biblioteca Nacional es una actividad que siempre resulta gratificante. Nunca deja uno de encontrar sorpresas tan deliciosas como esta noticia recogida por el diario La Época en el lejano año de 1884.
     Su tratamiento, aparte de imaginativo —por decirlo suavemente y sensacionalista, conserva a mi modo de ver esa suave nota de ingenuidad que teñía las viejas crónicas de lo lejano y lo desconocido "del mundo adelante", que decían nuestras abuelas, que eran constante fuente de asombro y admiración entre el público.

Transcribo la noticia literalmente, respetando la ortografía y la puntuación de la época.

UN DRAMA TERRIBLE
En la noche del 13 del actual, dos pescadores del pueblo de la Passade, situado entre Niza y Villefranche, llamados Baffi y Domenico, pescaron un tiburon que medía tres metros.
     El cetáceo fué herido en el costado por dos fuertes arponazos. El agujero de la herida era enorme. Una vez en tierra, el animal fué arrastrado hasta la cabaña de los pescadores y dejado en un rincon, para llevarlo á Niza al dia siguiente.
     A eso de las dos de la madrugada un ruido infernal despertó á los pescadores.
     Un perro de caza lanzaba espantosos ladridos y dos criaturas que dormían en una cuna exhalaban á la vez gritos lastimeros.
     Baffi y Domenico, encendieron la luz en seguida. Un espectáculo horrible se presentó ante sus ojos. El mónstruo, cuya herida no había sido mortal, desgraciadamente, acababa de salir de su letargo y con un sólo golpe de su terrible mandíbula había partido en dos pedazos al perro que estaba echado junto á la cuna de los niños.
     La desesperada madre se precipitó hácia la cama de sus hijos, pero su pierna derecha fué tambien presa del mónstruo y partida por debajo de la rodilla.
     Baffi se apoderó de un arpon y logró vaciar el ojo derecho del animal, que dió un salto terrible. Entónces la lámpara cayó al suelo, y se trabó entre ellos á oscuras una espantosa lucha. Los pescadores se precipitaron hácia la puerta de entrada, pero como faltaba la llave, no les era posible abrirla. Un vecino, Mr. Michelisi, atraido por el alboroto, se encaramó en una ventanilla situada á cierta altura, y le fueron entregados los dos niños; despues derribó la puerta y acudió en auxilio de los pescadores. Uno de ellos tenia á raya al tiburón con ayuda de una mesa, cuyos piés estaban hechos añicos.
     Cuando se abrió la puerta, el mónstruo se precipitó fuera y trató de ganar la playa. Los pescadores no lograron apoderarse de él hasta que le hubieron vaciado el único ojo que le quedaba.
     La madre de los niños, tan cruelmente herida, no ha sucumbido todavía; y despues de los buenos resultados de una amputacion practicada por el doctor Gabrielli, se han concebido grandes esperanzas de salvarla.
     El tiburon era uno de los más terribles de su especie, y hacía dos ó tres meses que era perseguido sin descanso.

La Época, 20 de junio de 1884, p. 4. 

La Época era un diario de carácter conservador que estuvo en circulación entre los años 1849 y 1936. Durante la Guerra Civil sus talleres fueron incautados para imprimir El Sindicalista, del Partido Socialista. Qué cosas, ¿verdad?


7 comentarios:

  1. Me llama mucho la atención lo de "cetáceo". Es común que algunas personas confundan mamíferos marinos con peces, pero a la inversa no lo conocía. Muy interesante, aunque no se de que tiburón se trataría para tenerle tanto pánico y tres meses de búsqueda.

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    1. Pues en la prensa de aquellos años es muy común encontrar el término "cetáceo" aplicado a los tiburones.
      En cuanto a la especie implicada... Pues no conozco ningún tiburón que se dedique a perseguir al personal por la cocina de una casa y aproveche una puerta abierta para largarse de vuelta al mar... ni en los mejores capítulos de la Pantera Rosa. :)

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    2. Jaja no me refería a esa situación si no más bien a "un tiburón de 3 metros de largo, uno de los más temibles de su especie". Salvo que en aquella época pudieran encontrarse todavía tiburones blancos dentro del mediterráneo, no se que especie pudiera ser.

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    3. :D Ya imaginaba... pero no pude evitar el chiste fácil.
      Pues en aquella época sí que había tiburones blancos en el Mediterráneo, y de los grandes (por grandes entiendo de 4,5-5 m para arriba), pero ojo, todavía sigue habiéndolos, tal vez ya no con esas tallas. De vez en cuando oímos de algún avistamiento o de alguna captura accidental. Eso sí: lo que no sabemos es cuántos ni cuánto tiempo van a estar ahí.

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  2. Yo había leído que en el Mediterráneo pueden encontrarse juveniles de tiburón blanco, no animales adultos. Me refiero a que los animales jóvenes se alimentan de atunes y demás y los grandes tiburones se alimentan de mamíferos marinos. De modo que la presencia de estos animales en el Mediterráneo era para animales de tallaje entre los 3-4 metros, que se alimentarían de atunes (entre otras cosas). De hecho, creo que ha habido algún accidente en las jaulas de engorde de atún.

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    1. Qué va, de juveniles nada. Te aconsejo un librito muy documentado de Alessandro De Maddalena: Mediterranean Great White Sharks. Es un poco caro para el tipo de edición que es, pero en fin. Ahí verás registros de ejemplares de hasta 6 metros, acompañados de fotografías. Por ejemplo, hay decenas de registros en aguas españolas, sobre todo Mallorca.
      No te olvides del blanco que apareció moribundo en Tossa de Mar, Gerona, en 1992: un macho de 475 cm si no recuerdo mal. Aquí tienes las imágenes:

      https://www.youtube.com/watch?v=4fOzA-k5BQk

      Si necesitas cualquier otra info (alguna fotocopia incluida) ya sabes.

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  3. Muchas gracias por la información Toño. Un pelín caro si que es el libro si... jejeje

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